Nació en Salzburgo el 27 de enero de 1756. Desde los cuatro años, adquirió un asombroso dominio del violín, del piano y de la composición. Su padre, Leopold Mozart, pedagogo y compositor musical, no tardó en descubrir las extraordinarias aptitudes del niño.
En una serie de memorables conciertos, donde se presentaba con su hermana Mariana, el pequeño Mozart se hizo aplaudir en las cortes de Munich y Viena.
En 1764, a los ocho años de edad, este niño prodigio terminó “Apollo et Hyacinthus” (1767), “Bastien und Bastienne” (1768) y “La Finta Semplice” (1768). En 1771 compuso la fiesta teatral titulada “Ascanio in Alba” Al año siguiente estrenó “El sueño de Scipione”.
En su tercer viaje por Italia compuso la ópera “Lucio Silla” (1772). El primer éxito, en esta etapa de su vida, fue el estreno de “El rapto en el Serrallo” (1782), siguiéndole la “Misa en Do menor” (1783) y la comedia musical “El Empresario” (1786).
En ese año conoció a Lorenzo Da Ponte, quien le proporcionó el libreto de la ópera “Las Bodas de Fígaro” De esta colaboración surgió “Don Giovanni”, estrenado en Praga, el 29 de octubre de 1787, otra de sus obras maestras. Una tercera y última labor en común dio por resultado “Cosi fan tutte”.
En 1787 es designado “músico de cámara” en Viena. De ese año son sus tres grandes sinfonías, las números 39, 40, 41; que también son las últimas que creó.
En julio de 1791, un misterioso personaje le encargó un “Requiem”, a pedido del Conde de Walsseg. A los pocos días estrena, en el mes de septiembre, sus dos últimas óperas: “La Clemencia de Tito” y “La Flauta Mágica” A los dos meses de este último estreno Mozart fallece, el 5 de diciembre de 1791- Tenía sólo 35 años, y de esto hace más de doscientos años.
Obras realizadas en el ciclo: La Flauta Mágica